LAS FIESTAS DE SAN JUAN Y SUS VISITANTES (I)

El Ayuntamiento con autoridades e invitados en el monte Valonsadero en una imagen de mediados los años cuarenta, antes de construirse el merendero (Archivo Histórico Provincial)

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Que en este 2020 no haya fiestas de San Juan presenta la oportunidad de acometer algunas otras facetas que aun no constituyendo motivo troncal de las celebraciones sí tuvieron en su momento una especial relevancia en el acontecer festivo por más que resulten desconocidas para los estudiosos y amantes de la tradición de los sanjuanes.

Una de ellas pudiera estar referida a dejar constancia de por ejemplo las personalidades del mundo de la cultura y, en menor medida, de la política que por las circunstancias que fuera decidieron compartir con los sorianos el ritual antiquísimo de unas celebraciones sobre las que, digámoslo también, al cabo de los siglos continúan planeando demasiados interrogantes que no han sido desentrañadas en el transcurrir de la historia, ni que se sepa tampoco existe proyecto conocido alguno y en último término intención decidida de llevar adelante tarea semejante. Al menos desde donde le alcanza a uno la memoria.

Pues bien, vamos a recordar a algunos de estos ocasionales visitantes que bien en calidad de invitados o simplemente como turistas conocieron desde dentro nuestras Fiestas de San Juan

Puede ser el caso del poeta Gerardo Diego que algunas fuentes dan por cierto que pasó en Soria las jornadas festivas del año 1929, y en concreto la del 30 de junio, acaso porque como ha constatado el profesor Gómez-Barrera en aquellas fechas acababa de regresar de Argentina y viajó a Salduero, donde vivía su amigo César del Riego, para reponerse de una operación de apéndice. Pues en la localidad pinariega, señalan familiares directos de Del Riego, residía con su madre –viuda- y sus hermanos en casa de su tío Benito Moreno Ventosa, párroco de la localidad, Y a mayor abundamiento, Gómez-Barrera tiene documentado que el día 10 de julio Gerardo Diego asistió en Soria a una conferencia de la escritora María Teresa León, integrada como él en la llamada generación del 27.

Finalizada la Guerra Civil, el Viernes de Toros (1 de julio) de 1949 llegó a Soria el académico y escritor José María de Cossío, por otra parte experto y gran aficionado al mundo taurino, para dar una conferencia.

El 24 de junio de 1964 (Miércoles El Pregón) fue el embajador en España de los Estados Unidos de América, Robert Forbes Woodward, el que vino a Soria invitado por la Cámara de Comercio, pues por aquel entonces el diplomático norteamericano y la entidad cameral mantenían una especial relación con el objetivo de fortalecer las relaciones comerciales. La complicidad se materializó con la entrega al ilustre visitante del título de Presidente de Honor de la Cámara de Comercio. Con esta excusa, por otra parte intencionada, tuvo la posibilidad de conocer nuestras Fiestas.