El Magirus estacionado en el exterior del Parque de Bomberos.
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Una de las novedades de la Cabalgata de Reyes del presente año ha sido la presentación de un viejo camión de bomberos. En realidad una autobomba-tanque –con este nombre se presentó en su día, al comienzo de los años sesenta del siglo pasado- que en aquellos tiempos era una verdadera atracción por las prestaciones que ofrecía. Las principales capitales de provincia españolas -entre ellas Barcelona- disponían de este moderno vehículo para la extinción de incendios.
En la pequeña Soria de entonces el Magirus, nombre por el que comúnmente se le conocía, fue tema de conversación en todas las tertulias de una ciudad que se modernizaba en todos los ámbitos a pasos agigantados, o al menos lo pretendía, en la que comenzaban a proliferar –es un decir- los edificios cada vez más altos.
Esta fue la razón por la que el Ayuntamiento decidió renovar la flota –por llamarla de alguna manera- del parque de bomberos pues el nuevo vehículo garantizaba el acceso a las edificaciones más altas de la ciudad en caso de siniestro.
El Magirus llegó a Soria a comienzos del mes de febrero de 1960. El Ayuntamiento –Alberto Heras Hercilla era el alcalde- lo había comprado a la Compañía Española de Motores Deutz Otto Legítimo S. A. Y pocas fechas después, el día 5 del mismo mes de febrero, se llevaba a cabo la primera prueba, que fue en el puente de piedra del río Duero.
La historia reciente del que en su día fue un novedoso vehículo la hemos conocido estos días.